Nuevos estudios para los nuevos tiempos

¿Te has puesto a pensar cuántas nuevas profesiones y titulaciones han aparecido en los planes educativos desde que empezó este milenio? De hecho, muchas ya contaban con gente que trabajaban en esos campos sin que ni siquiera tuvieran nombre, ni un plan de estudio donde adquirir conocimientos teóricos. Pero tal como evolucionaba la sociedad, estos puestos aparecían, y claro, las autoridades educacionales tuvieron que tomar cartas en el asunto. Por ende, ahora tenemos en la cartera de Educación una lista de carreras y formaciones que hace un par de generaciones (o una si me apuras) serían impensables.

Por ejemplo, la UCV (Universidad Católica de Valencia) ha sido la primera institución de estudios superiores en ofertar una titulación que se ocupa de prevenir la adicción a la pornografía. Muy concienciados de lo que este producto dirigido a adultos está influyendo en gente joven, y cómo sus efectos no preocupan lo bastante para considerar que al final estamos hablando no solo de malos hábitos sexuales sino de una verdadera adicción, esta universidad se ha decidido a ofrecer a todos los estudiantes de Magisterio cuyas especialidades estén dirigidas a los más jóvenes la oportunidad de acceder a esta titulación. Su intención es que estos futuros docentes puedan educar a sus alumnos junto con sus familias para que tengan una relación sana de afectividad y sexualidad, no basada en estereotipos poco correctos.

La verdad es que uno puede llegar a pensar que nuestros jóvenes ya estarían más libres de los efectos que el contenido xxx gratis de internet había producido en las generaciones anteriores, gracias a que ahora tienen otros intereses relacionados con el ciberespacio: redes sociales, plataformas de streaming, juegos online… Pero no, fíjate que no. Porque los estudios confirman que nuestros jóvenes siguen consumiendo más porno online que si sumamos todos los demás usos que hacen de la red. Y es que está claro que la pornografía se hizo la reina de internet en sus inicios; y quien tuvo, retuvo. Hoy en día, pese a los controles que se han puesto en el acceso a los contenidos adultos para intentar que el consumo de pornografía fuera hecho de forma responsable y consciente y que pueden llegar a disuadir a muchos cibernautas, la verdad es que el porno gratis sigue siendo la gran atracción de la red. Y eso tiene sus efectos en sus consumidores; que aunque no son muy diferentes a los de antaño, sí que preocupan mucho más a la sociedad.

De todas formas, es curioso que la preocupación de los efectos de la pornografía haya sacudido las conciencias, primero, de una Universidad católica. Porque puede que este arte sea una mala influencia en algunos sectores de la sociedad, y que eso sea razón para que sociólogos y educadores vean un peligro en potencia; pero uno esperaría que las personas cristianas practicantes fueran inmunes a ella. Ah, qué bien queda ahora eso de quién esté libre de pecado que tire la primera piedra. Pero más allá de este debate religioso, es bueno que alguien, sea quien sea, se preocupe de buscar soluciones a los nuevos peligros de internet, y en general de las nuevas tecnologías que nos rodean. Desde luego, una felicitación a estas personas.

Y así como esta novedosa titulación de la UCV, han aparecido muchas otras, la gran mayoría relacionadas con internet y las páginas web. O la influencia de las redes sociales en los negocios y empresas. O la forma en que la información de la red llega al público, por edad, género o estilo de vida. En fin, que hay muchos sectores en pleno estudio, y por eso deben aparecer en el organigrama de cualquier buena ley de Educación.